PARA ESTAR SALUDABLE, HAY QUE PROCURARLO

Es aconsejable hacer, por lo menos, dos visitas al médico cada año. Se denominan órganos nobles, aquellos que son imprescindibles para la existencia y buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Estos son: el corazón, los riñones, los pulmones, el hígado, el páncreas. Es importante enfocar nuestro chequeo anual sobre estas áreas. Su mal funcionamiento o cualquier enfermedad que les afecte, repercute en el resto del organismo; y tarde que temprano, precipita la llegada de la muerte, posiblemente, antes de tiempo. Resulta de suma importancia, procurar que se mantengan sanos, o a la sumo, lo más saludable que nos sea posible. De modo que, debemos evitar, todo lo que les perjudique.  Los órganos nobles trabajan mucho. Casi no descansan. Aún descansando trabajan. Trabajan toda la vida. No le dé más carga de lo que realmente y razonablemente deben llevar.
Otro aspecto a considerar es, y esto no lo olvide, que se debe tomar en cuenta el medio en que usted vive. Es decir, su cultura, educación, costumbre, sus medios naturales, los tipos de alimento a los cuales se está acostumbrado, sus creencias. Todo ello, desde el punto de vista de su propio país. Muchas veces tendemos a imitar la costumbre de otro u otros países, aparentemente más sanos, sin considerar o tomar en cuenta el medio de los mismos, que en diversas circunstancias no se adaptan al nuestro. Esto puede traer serias consecuencias, negativas claro, para nuestra salud.
Debemos tomar en cuenta, también, condiciones genéticas familiares, ya que si en una familia es frecuente una enfermedad o dolencia, existe mayor posibilidad de que sus miembros en rango descendiente puedan llegar a desarrollarla. Por ejemplo, si nuestros padres o uno de ellos padece del corazón, esto no es cien por ciento, pero hay mayores posibilidades de que alguno de sus hijos pueda llegar a padecer esta enfermedad. Ahora bien, esto no lo digo para que ahora usted vaya a pensar que padece o padecerá esta condición, lo digo para que lo tome en cuenta y guarde el cuidado que amerita en dicho caso.
También debe tomarse en cuenta, el tipo de fisonomía que hemos tenido toda la vida. Por ejemplo, existen personas que siempre han sido gorditas o delgaditas o como decimos en nuestro país, flaquitas; si una persona ha sido así toda su vida, esa es su fisonomía natural. No tiene por qué preocuparse. Aunque debo aclarar, que hay personas que son gorditas por su ansiedad al comer o flaquitas por su mal comer, esto sin llegar a la abulia o la anorexia (entidades no muy frecuentes en nuestro país), que ya son consideradas como enfermedades psiquiátricas, sino que más bien hablamos de hábitos perjudiciales.
Medita sobre todo esto que te digo y cuídate más. Conócete más.
Nadie mejor que tú para cuidarte a ti mismo. Cuida tu salud. Hasta luego.